domingo, 30 de mayo de 2010

AZUL


Hoy es un día. Con sus 24 horas. Su amanecer. Su atardecer. Su noche. Sus horas de luz.
Pero es UN hoy.
Es un hoy de aguas azules en calma, pero que esconden su interior un peligro de otro mundo. De algo que no queremos despertar. Porque lo llaman el azote de los mares.
Cerca hay una isla volcánica joven. Me gusta pasearme por allí. Es ardiente y a la vez cálida. Tiene reflejos dorados y está moteada por la arena, como cuando te pones al sol en la playa y se te queda pegada al salir del agua. Desde arriba nos hace señales, despide fogonazos y se esconde tras las nubes.
El aguamarina me salvaría de todo esto. Tostado como la arena misma mojada. Maleza enmarañada.

Sentado sobre mis propios hombros, está feliz y contento el sentimiento de culpa. Sabe que no tengo ningún derecho a decirle nada. No puedo echarle. Pero, ¿sabes?, eso me hace sentir vivo. Todavía tengo la capacidad de sentir.

Y mientras The Moongose flies, On by.

Para el reproductor. Y escúchame de verdad. Nada de esto se entiende si no es por medio de unos ojos azules.

jueves, 20 de mayo de 2010


"Set the controls for the heart of the sun"
Como en un cuento de Sherezade.

Voz umbría sombría, tempestad en su mirada, historias sacadas del mismísimo vientoligero.Es un alma atormentada por la amenaza de otra cuya piedad "has no beggining."
Su nombre de pila es innombrable, pero continúa melódicamente, no parece ni siquiera que necesite respirar, o yo por lo menos no lo distingo. Tiene algo envolvente y a la vez liberador.
Siento la misma sensación que cuando reconozco quién toca esa canción que nunca antes escuché solamente por el rasgado de la guitarra, la voz o la distorsión que utiliza.
El rifft cae una y otra vez en la misma nota, crescendo, silencio... el último suspiro del platillo flota en el aire, completamente etéreo... Y entonces entra. Entra la guitarra y yo entro en éxtasis. Todo mi cuerpo responde a un impulso primigenio, incontrolable e incansable, se mueve a un ritmo infernal, el instinto es insaciable. No voy a hacer por reprimirlo.

Hoy he visto por primera vez en este año esos vestidos vaporosos y esas curvas sinusoides y sigmoideas tras un tejido a contraluz. Vuelven todos los años, y eso me gusta. Me he enamorado de todas y cada una de ellas, mujeres anónimas que desvían sus miradas, no sé si por vergüenza o por prepotencia. Si es por lo segundo, por lo menos conmigo no consiguen otra cosa más que sacarme una sonrisa. Tampoco entiendo por qué me he de sentir culpable por mirarte el escote, al fin y al cabo, las cosas de ver se ponen a la vista porque ese es su propósito. Pero si te molesta no hay problema, intentaré estar mirando cuando tú no me estés mirando a mí. Es difícil, lo sé.(Cualquiera de las cosas que estés pensando)

Volver a mi colegio por la mañana me ha avivado todos estos sentimientos, pero realmente es la universitaria y los buses llenos a todas horas los que me dan estos momentos.

-You're so hilarious man!

sábado, 15 de mayo de 2010

Changing my mould.

A veces una simple conversación habla de todo y de nada. Marca un punto de inflexión cuando estás en la cuerda floja. Equilibrista sin red.
La vida es simple, solo preocúpate de respirar.
¿Cuántas esquinas he de doblar, cuántos momentos me han de pertenecer? (Aschroft)
Todo lo que tienes es aquello que está en tu cabeza, el resto es patrimonio de la humanidad.
Hay susurros esperanzadores y gritos desesperados, pero al final las palabras se quedan flotando, inertes, inmóviles. Tu motor es el pensamiento.
Parece que fuese a desvanecerse en cualquier momento, como un cristal de sal al sumergirlo en agua. Comienzas viendo a través de él, y luego, dejas de verlo.
La música es la vida. Y no paro de vivir día tras día.
Sí, después de esto viene la querida fase REM, que ordenará todo esto y le dará sentido.
Antes de terminar, "The drugs don't work".
Rellenan huecos y espacios con euforia y vitalidad.

-Nena, iremos a París a chutarnos heroína y a follar con las estrellas.

lunes, 10 de mayo de 2010

El proyecto de Alan, Parson.



Iridiscencia, calma después de tempestad.
Llevo unas tres horas andando, y cada vez que miro hasta dónde tengo que llegar para rodearlo, no veo más que agua. "-Joder, si fuese un río se movería o algo. Habría una corriente"
He pensado en intentar cruzar a nado. Pero la verdad es que un chapuzón a estas horas de la mañana no apetece con el frío. Es exactamente como dice Iggy, he visto las estrellas escapar del cielo. Parece que el Sol está deseoso de ver a la Luna, como si fuesen amantes secretos, y él hubiese pasado la noche con su mujer. Realmente yo creo que le da miedo la noche, y por eso persigue al día allá donde vaya. No se despegan. Joder, todo ha sido hecho para ti o para mí. Me siento lleno.
Me pregunto qué coño será lo que está pasando. He buscado por todos sitios pero no encuentro lo que busco, y busco una salida. Sigo diferenciando las torres de Plaza Castilla, pero cada vez se alejan más. Echo la vista atrás, el Sol ya me pega en la cara y tengo que fruncir el ceño para poder ver bien.
Pronto me despreocupo, quieren estar solos y corren una cortina de nubes para que nadie les vea. Sucede algo imprevisto, alguien llora, y no son las nubes. Es ALGUIEN.
Pero ¿dónde?
Puede que sea el viento, joder, parecía tan real... Pero como viene se va. ¿Puede que sea el hambre?
Sigo con la mochila y los apuntes guardados. No tengo nada comestible, todavía aguanto. Un estuche del Atleti y unos cuantos bolígrafos, una regla, clips y Tippex.
Todavía hay verde y la temperatura es agradable. No tengo otra cosa que estar conmigo mismo. Decido darme el tiempo que quiero y tumbarme donde sea más cómodo.
El viento corta las briznas de hierba, y susurran. Es melodioso y cálido. Me dejo arropar. Podría tirarme horas arrancando hojitas y pasando la mano para reconocer el relieve sin mirar. Lo estoy pensando, ¿porqué habrá tanta agua y no esté mojada la hierba? A parte de lo que el rocío pudo dejar, no parece que se haya infiltrado nada, la arena está seca y compactada. Mientras intento que algo tenga sentido vuelvo a notar ese calor que te invade la cara y que poco a poco te adormece. Es una batalla perdida, no hay nada que le puedas ofrecer. Todo lo que quieres lo tienes porque te lo da.

Despierta, despierta, despierta, des... Da igual.

Ha ocurrido algo mientras dormía, lo intuyo, las cosas no están como antes. ¿Sabes de lo que te estoy hablando? Es la misma sensación que siente las hormigas cuando les cortas el camino mientras van en fila una detrás de otra o la que sentían los perros de Pavlov cuando sonaba la campana y no había comida.
Algo ha cambiado.
¿Parece que haya menos agua, o es sólo mi imaginación?
Ciertamente a algún sitio debía de ir ¿no?
Paso, hace la temperatura perfecta para un bañito y de paso hago deporte. La ropa es incómoda. La guardo en la mochila, que me había servido de almohada antes.

A por ello.